lunes, 30 de agosto de 2010

Con mi delicada barca roja navego en una costa sin faro...

Con mi delicada barca roja navego en una costa sin faro, guiado por los resplandores de tu manto ennegrecido fijo mi destino, las sensibles aguas crujen la desgastada madera y el recuerdo del viento impulsa mi desgastada vela, todo me lleva hacia ti...